Indignado culé

9 de octubre de 2009 David Crispín 0 Comments

Un fantoche con máscara veneciana de ángel redentor se presentó como solución a la crisis que atravesaba el club allá por los tiempos de la decadencia del imperio "gasparista".
La estabilidad y la esperanza hicieron de su disfraz un lugar poderoso donde refugiar sus reales intenciones. Pero poco a poco la máscara del supuesto salvador fue desquebrajándose y mostrando su verdadera identidad hasta convertirse en un proyecto mal fabricado de político que ahora es famoso por sus patéticas e inadmisibles actuaciones hitlerianas.
Ciertamente suena quimérico que una de las mayores épocas blaugrana, futbolísticamente hablando, vaya cogida de la mano de las vergonzosas actuaciones de un político frustrado.
El daño que el señor Laporta está haciendo al barcelonismo es de dimensiones tan desproporcionadas que no cabrían ni en la chistera del mejor mago del mundo
Y por eso, desde mi humilde blog, le escribo estas palabras (aún a sabiendas que nunca las leerá)... el Barça no es política, no es independentismo, no es su catapulta a un escaño, va más allá de Cataluña, más allá de España... el FC Barcelona es historia del deporte, y los culés no queremos que personajillos como usted manchen el nombre y la identidad de uno de los mejores clubs de la historia.

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